Ella pensó que era un juego que podía ganar.
Entonces las reglas cambiaron.
Todo lo que Zoey Greene tenía que hacer era pasar una semana trabajando en la casa de un multimillonario misterioso. A cambio se iría con un grandioso millón dólares.
Pan comido.
Cuando llega a la mansión, Zoey descubre la sorprendente verdad sobre su nuevo empleador, Ethan Banfield. Intenta huir, pero es demasiado tarde. Está atrapada con un monstruo despiadado que no exige nada menos que obediencia total.
La oscuridad que ha estado carcomiendo a Ethan ahora amenaza con consumir a ambos, el tiempo se agota para que Zoey rescate lo que queda de su fuerza de voluntad y haga que su captor vea que, con la persona adecuada a su lado, incluso el más negro de los corazones puede encontrar una salida a la luz.
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